Reflexiones de un Viaje Solitario.

Estoy enojada contigo... sencillamente ya no puedo soportar tu presencia al lado de la mía. Quiero gritarte, golpearte hasta que sangres, decirte que te vayas y que nunca más vuelvas. Quiero verte morir lentamente por mis propias manos, ver como se te escapa la vida de los ojos. Estoy tan enojada contigo por todas tus tonterías, tú ignorancia, tu desaliñes, que simplemente ignorarte no es suficiente. Hay días en que ya no te soporto más, en los que solo oír tú voz me causa una seria desesperación. Eres molesto, angustiante, desesperante; tú poco interés por la vida, por tú futuro, tú presencia, tú poca ambición y tú conformismo; es estúpido, despreciable, nauseabundo y sobre todo absurdo. No quiero volverte a ver... No quiero que me vuelvas a hablar... No hasta que cambies totalmente lo que eres ahora y mejores... No quiero volverte a ver, nunca más; porque aunque no te odio por completo... No quiero volver a soportarte. Por: Jimena Mena. Espero les guste, es un fr

... Aquel delicioso aroma a tierra mojada, llevado hasta el rincón más profundo de la tierra por un viento juguetón. El refrescante olor a mar que aborda los pensamientos de un verano ya olvidado. La esencia matutina del café recién hecho después de una larga noche de trabajo. El extraño y exquisito perfume a polvo y humedad de la biblioteca más antigua de la ciudad. Aquella embelesadora loción a chocolate y vejez que emite un libro almacenado desde hace muchos años en lo más obscuro de un librero. Ese último rastro a mantequilla y avellana que deambulaba en la cocina, después de haber cocinado durante horas un curioso y pequeño pastel. El ligero cambio en los aromas del otoño, dando paso a las esencias del invierno. Esa fragancia frutal, fresca y entretenida del parque a mediodía en mitades de la primera. La colonia amarga y triste que percibes con el recuerdo de una persona que desapareció de tu vida hace mucho tiempo atrás. El olor del primer viaje a Europa en comp